Año Jubilar

Año Jubilar
Presentación Año Jubilar

800 Aniversario de la Invención de las Santas Reliquias

de los Santos Fulgencio y Florentina.

 

El papa Gregorio Magno, en prueba de amistad, regaló a San Leandro la imagen de la Virgen de Guadalupe, que este expuso al culto público en la Iglesia de San Juan Bautista de la Palma, en la ciudad de Sevilla, para que presidiese el panteón familiar, donde más tarde fueron enterrados los cuatro hermanos santos. Allí estuvieron hasta que, a principios del siglo VIII, con motivo de la invasión musulmana en España por temor a que fueran profanadas y violadas estas santas reliquias que con tanta veneración se guardaban en Sevilla, los clérigos y cristianos de esta ciudad, huyeron con ellas juntamente con la imagen de la Virgen de Guadalupe, dejaron a está en la parte oriental de las Villuercas y las reliquias de los Santos en la parte occidental.

 

Aquí estuvieron enterradas hasta el 26 de octubre de 1223 en que fueron descubiertas por medio de un labrador que se hallaba arando, habiéndose enganchado la reja del arado con una argolla de hierro, que resultó ser del sepulcro de mármol en la que se encontraban dichos restos, con unas escrituras que atestiguaban ser dichos santos.

 

El pueblo de Berzocana empezó a darles culto en una capilla de la Iglesia Parroquial al lado del Altar Mayor, y como los fieles se veían favorecidos por varios milagros, se extendió su fama por toda la comarca llegando más tarde la noticia a Murcia del feliz hallazgo de sus reliquias. Intentan llevárselos por derecho de reivindicación, es decir, por haber nacido estos santos en Cartagena, que pertenecía al mismo obispado, alegando además que en Berzocana no se les tributaba el culto debido, para cuyo fin, el año 1593 llega a Plasencia el Doctor Arce, canónigo de Murcia, exigiendo su devolución.

 

El Cabildo de Plasencia y el de Trujillo, el consejo de esta Villa, el cura párroco Juan Rubio de Barambones, el Prior de Guadalupe Fray Pedro de Santiago y otros monjes de dicho Monasterio, el prior del Escorial y otro monje del Real Monasterio, hijo de Berzocana, se opusieron con todas sus fuerzas a las pretensiones de Murcia, que tuvieron que acudir a Rey Felipe II para que diera el fallo de la causa. El Rey pide información sobre las causas alegadas por Murcia y envía dos veces al Padre Talavera para cerciorarse del culto y veneración que tienen las Sagradas Reliquias en Berzocana.

 

Convencido el Rey por todas estas informaciones, del amor, afecto y veneración que se tenía a estos Santos por parte del pueblo de Berzocana, Guadalupe, Plasencia, Trujillo y pueblos de la comarca, tuvo a bien sentenciar a favor de Berzocana sobre la perpetua posesión de dichos cuerpos, a condición de que se le enviasen cuatro huesos, dos para guardarlos en su relicario y otros dos para enviárselos a Murcia.

 

El mes de octubre de 1593 se enviaron a Su Majestad, viniendo a tal efecto el Obispo de Plasencia, para hacer la escritura y entregar al Prior de Guadalupe en esta misma Iglesia. De la Iglesia Parroquial de Berzocana fueron trasladadas a Guadalupe con gran solemnidad. El pueblo de Guadalupe salió a recibirlas procesionalmente con la asistencia de toda la comunidad del Monasterio y fueron colocadas bajo llave en la iglesia del Monasterio hasta que fueron llevadas a El Escorial.

 

Una vez que Berzocana entró en perpetua posesión de las Sagradas Reliquias de San Fulgencio y Santa Florentina, aumentó aún más si cabe la devoción hacia ellos. Para ello y para que nadie en lo sucesivo pudiera decir que la Villa no les tenía estima y no se les daba el culto debido, creyendo que sus santos merecían una capilla más suntuosa que la primitiva deciden hacer un artístico mausoleo de piedra de grano con un estilo barroco, que tan bien encaja en la construcción arquitectónica de la Iglesia y allí se encuentran en la actualidad, encerradas en una artística arca de madera de carey, con incrustaciones de ébano y piedras preciosas regalo de Felipe II. En ella se encuentran la mayor parte de los huesos con tierra y granos de trigo del lugar y fecha en que se descubrió el sepulcro. A ambos lados del arca hay dos relicarios con plata dorada con los cráneos y otros huesos y el peine de madera que usó la Santa. También existen otros huesos encerrados en tres fundas de plata que se usan para la adoración de los fieles siempre que hay misa con exposición de las Reliquias y en la fiesta de los dichos Santos. En otro relicario de plata está el velo o toca de la Santa.


 

Próximo a cumplirse el VIII CENTENARIO de este acontecimiento, que determinó el compromiso de fe de Berzocana con tan insignes Santos, lumbreras de la Iglesia y, junto a sus hermanos Leandro e Isidoro, artífices de la unidad religiosa y política de la España visigoda; es llegado el momento de rememorar aquella fecha y aprovechar la ocasión para reivindicar el justo lugar que los corresponde ocupar en la historia y en el culto católico.


 

Bajo los auspicios del Sr. Obispo de Plasencia, y en estrecha cooperación, Ayuntamiento, Parroquia y Cofradía, quieren dar el mayor realce posible a la conmemoración, a fin de conseguir el conocimiento generalizado de San Fulgencio y Santa Florentina. Para lograr este objetivo, con gozo y espíritu cristiano, nos disponemos a celebrar este Año Jubilar, bajo el lema: “Familia, camino de Santidad”, para iniciarlo el 26 de octubre de 2023, con solemne apertura, prologándose hasta el 26 de octubre de 2024, en cuya fecha tendrá lugar su clausura. Será un año propicio para responder a la llamada del Espíritu Santo, a caminar junto a Cristo, alimentándonos de su palabra y así comunicar la alegría del Evangelio.

 

Durante la vigencia del jubileo, el templo parroquial y más concretamente, la capilla-santuario de los Patronos de la Diócesis San Fulgencio y Santa Florentina, se convertirá en lugar, donde los fieles que lo visiten, podrán alcanzar la indulgencia plenaria.

 

Mediante esta carta queremos invitar a autoridades religiosas, civiles y militares; parroquias, cofradías, asociaciones y a todos, berzocaniegos y foraneós a participar con alegría en este año santo.

Recibid un cordial saludo en nombre de la Pontificia Cofradía de los Santos Fulgencio y Florentina y que por los méritos de nuestros Santos Fulgencio y Florentina, nos conceda el Señor la salud y la paz.